viernes, 14 de abril de 2017

6. Zapatos de fierro

El país de irás y no volverás, el destino buscado en el fin del mundo está a la distancia exacta de gastar tres pares de zapatos de fierro.
¿Ya están usadas las suelas?
¿Ya estamos llegando?

Mongolia viene siendo una metáfora de ese viaje: un lugar que, más que un lugar, es una manera de llegar.
Quién sabe si ya estamos listas, si entendimos el mapa, si ya están puestas las puertas por franquear.

"104 días de Akasha", Chique Clío

Estamos a mitad del ciclo NIEVES EN CHIPRE: para lograr el futuro posible.
¿Tienes claro tu propósito personal? ¿Y el colectivo?
Ojalá seamos suficientes caminantes andando, para lograrlos.

En la Semana Santa, el Viernes Santo corresponde a la Prisión de Jesús. Los interrogatorios de Caifàs y Pilato. La flagelación. La coronación de espinas. El Vía Crucis, la crucifixión y la sepultura.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Brutal...
http://www.cuentosinfin.com/los-zapatos-de-hierro/

MRP CONSULTORA dijo...

Tres gracias, perder el alma, la búsqueda del alma, el amor, nada es fácil, hay pérdidas, sacrificios, todas juntas, que he perdido en este camino, que duele, que reconozco.los zapatos que hay que gastar para encontrar el alma.
lei el cuento... brutal.

Selenita dijo...

Nota: Antes de leer esta Carta hoy (es que internet viene y va y temí que se fuera y no volviera), entraron a mi casa 2 pajaritos, uno verde-amarillo y el otro negro. Se instalaron en mi alcoba, se paseaban de la mecedora a mi almohada y luego a la ventana y pa'dentro otra vez. Por más que lo intenté, no salieron del cuarto. Me rendí ante su (en)canto y les puse agua y semillas.
Ahora estoy con la Carta. Al terminar veré si se durmieron sobre mi almohada, o siguen saltando de una manera muy cómica de un lado a otro sin decidirse a salir por la ventana. La curiosidad no me venció como a María y tampoco quise romper el hechizo. O tal vez fue el temor de quedarme de nuevo incomunicada y tener que hacer una parada obligada en mi viaje.
Curioso evento. Me dejó pensando. Casualidad?
Percibí como una analogía con el País de Nunca Jamás, sólo que sus protagonistas no envejecieron.
Zapatos de fierro, ropa liviana y una vara. Largo camino, tortuoso camino pero afortunadamente iluminado.
El País de irás y no volverás será Mongolia? Me anoto. Pero dejadme terminar con este, plis!