jueves, 24 de marzo de 2016
11.Leviatan
Jonás, como Pinocho, necesita pasar por el vientre del monstruo para llegar a ciertas conclusiones, a ciertos acuerdos. Parece que entender ciertas cosas resulta más fácil in utero, donde el útero puede ser una cueva, el recogimiento de este Jueves Santo, un retiro espiritual andante de 104 días o un viaje a la montaña para visitar a tu BabaYaga personal.
Cuando el útero es fósil, como le sucede a este explorador del mundo, lo que descubre es la evolución. Una maternidad extendida hacia los límites de la abstracción: la idea de lo materno; la idea de la evolución. Lo que sostiene amorosamente, nutriciamente, aquello que progresa y cambia siguiendo las leyes de la adaptación y la mutación.
Sublimación de la madre.
En la cueva, vientre de la tierra, los enanitos mineros de Blancanieves encuentran gemas. Leonardo encuentra conchas de mar, y entiende.
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1 comentario:
solo se que no se nada, me perdí, muy profundo ...
cómo llegué al vientre del monstruo... ya estoy adentro, un espacio amplio, grande, calido, ténue, no me puedo acostumbrar a él, debo salir.
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